La mejor explicación didáctica y de fácil comprensión de la MIOPIA, HIPERMETROPÍA Y ASTIGMATISMO, la encontré en el blog de OCULARIS , la cual transcribimos completamente, ya que esta es la base esencial para el estudio de la optometría.
Miopía, hipermetropía y astigmatismo.
Voy a intentar explicar en qué consisten los problemas de graduación y cómo los podemos solucionar. El ojo básicamente es una cámara oscura que tiene como misión enfocar una imagen en la retina. Para enfocarla nítidamente y conseguir una buena calidad visual, el globo ocular posee un sistema de lentes para conseguirlo. Son básicamente 5 lentes puestas una delante de otra, pero recurriremos a un modelo simplificado, las consideraremos todas como una sóla lenteUn ojo que tiene proporcionadas y regulares estas lentes consigue enfocar bien la imagen en la retina, ese ojo no tiene graduación, y nosotros lo llamamos emétrope. Disculpad si meto algunos términos técnicos, pero es que mi vocación frustrada es la etimología. Todas son raíces griegas: e, eu significa verdadero, correcto, auténtico, metros significa medida y op significa visión. Es decir, emetropía significaría “correcta medida en la visión”, la imagen está correctamente enfocada. Si hay un desenfoque entonces sustituimos el prefijo e por a, que significa negación. Entonces, todos los defectos de refracción (miopía, hipermetropía, astigmatismo, vista cansada) quedan englobados en el término ametropía.
Pero empecemos por el principio, tenemos que saber primeramente qué es una lente. Una lente es una “superficies refractiva”, es decir, superficie que refracta la luz. Refractar la luz consiste en desviar la trayectoria rectilínea de un rayo de luz al pasar a través de la lente (si la trayectoria se desvía sin atravesar el cuerpo entonces no es refracción sino reflexión, es decir, lo que hace un espejo).
Una desviación que hace converger los rayos de luz paralelos define a una lente convergente, también llamada positiva. El ejemplo más fácil son las lupas, los objetos se ven ampliados. En el dibujo veis que los rayos se cruzan en un punto, ese punto es el foco, o punto focal. Cuanto más potente es una lente positiva, más desvía los rayos, por lo que el punto focal está más cerca de la lente. Nos fijamos que las lentes convergentes son convexas
Una lente que hace lo contrario, que consigue que los rayos paralelos se alejen entre sí, se llama lente divergente o negativa. Los objetos se ven más pequeños a través de ella. Las lentes son cóncavas. En el dibujo nos fijamos primeramente en las líneas rojas, que son los rayos de luz.
Como los rayos tienden a separarse, nunca se van a cruzar, por lo que realmente no existe un punto focal real como ocurre con las lentes convergentes. Esto llegaría a ser un problema, porque el punto focal nos viene muy bien para medir la potencia de la lente. Pero podemos hacer una cosa: usando un “truco”, sobre el dibujo podemos prolongar los rayos divergentes hacia adelante, y entonces sí que se cruzan. Esas líneas, que aquí vemos de color negro, no existen, la luz no va por ahí, pero nos sirve bastante porque ya tenemos un punto focal virtual. Este punto, que no existe realmente, estará más cerca de la lente cuanto más divergentes sean los rayos, es decir, cuanto más potente sea la lente.

Bien, ya tenemos 2 tipos de lentes, las positivas y las negativas, ambas con un punto focal que nos sirve para medir la potencia. Precisamente la potencia de una lente la denominamos dioptría. Como la potencia de la lente es mayor cuanto más cerca está el punto focal, las dioptrías son inversamente proporcionales a la distancia focal. De hecho, la definición es de 1 partido por la distancia focal (expresada en metros). Con el ejemplo de las lentes positivas, una lente de una dioptría es aquella que es capaz de converger los rayos paralelos a un metro de distancia. Con 2 dioptrías el punto estaría a 50 centímetros, con 3 dioptrías a 33,3 centímetros, y así sucesivamente.
Tanto las lentes convergentes como las divergentes (positivas o negativas) que he explicado ahora son lentes que denominamos esféricas. Existe otro tipo de lentes, que apenas vamos a hablar de ellas.Los oftalmólogos usamos más el término “positivo” o “negativo” porque la convergencia también nombra a otro proceso ocular (aproximar las miradas de ambos ojos cuando se observa un objeto cercano), y reservamos el término para este segundo proceso.
Bien, volvamos a nuestro ojo. Resulta que en esa pequeña esfera que es un ojo tenemos que formar una imagen en su fondo, es decir, la retina. ¿como la formamos?. Bien, con una lente positiva, que consiga converger los rayos en su interior. De esta manera:

Éste sería el enfoque perfecto, es decir, un ojo emétrope. Vemos que el dibujo nos recuerda mucho al primero, al de las lentes positivas. Porque eso es el ojo, una lente positiva (globalmente). Como dato curioso, es una lente muy potente, porque tiene que converger los rayos (aproximadamente) paralelos que llegan de la lejanía dentro de los 2,3 centímetros aproximados que mide el ojo, y para ello necesita una potencia en torno a 60-65 dioptrías.
Bien, ya estamos en disposición de entender algunos de los problemas de refracción (es decir, algunas ametropías).
Supongamos que la lente del ojo es demasiado positiva, entonces el punto focal no cae en la retina, sino que está más próximo a la lente, es decir, por delante de la retina. Eso se llama miopía

Los rayos azules están modificados por la lente negativa convergen más atrás (donde deben ir, a la retina).
Ahora supongamos que ocurre al contrario, la potencia del ojo es menor que la necesaria. Los rayos con convergen correctamente en la retina sino que el punto focal se queda por detrás.

¿Cómo lo corregimos?. Aportando lo que falta, una lente convergente que aporte las dioptrías que nos quedaban.

Bien, ya tenemos a grandes rasgos los 2 defectos de visión que corregimos con las lentes esféricas. Podemos darnos cuenta que son opuestos y excluyentes. Es decir, no se puede tener miope e hipermetropía a la vez.
Nos queda un tercer defecto, que es el más difícil de entender. Se llama astigmatismo, que viene también del griego: a, negación, y stigma, punto. Es decir, falta el punto focal. El miope o el hipermétrope tienen el punto focal por delante o por detrás de la retina debido a que la lente del ojo es demasiado o demasiado poco potente, pero es una lente regular y homogénea, esférica.Si la lente del ojo es irregular, entonces no se forma un punto focal, no llegan a converger los rayos en un punto. En lugar de eso los rayos se aproximan hasta llegar a un área llamada círculo de menor difusión, que es lo más aproximado al punto focal. Pero en este círculo la imagen no está enfocada, sino difusa. Esto es el astigmatismo, de forma muy simplificada.El astígmata enfoca mal en todas las distancias, aunque lo puede notar más al forzar la vista de cerca (en la miopía y la hipermetropía, sin embargo, la distancia del objeto observado es muy importante). Un ligero astigmatismo es tolerado, de hecho ninguno ojo tiene un astigmatismo de cero absoluto, no existe el ojo “perfectamente regular”. Un astigmatismo de 0.25 dioptrías no suele necesitar corrección casi nunca, y se puede considerar normal hasta 0.50. Se puede tener hasta 0,75-1 dioptrías sin necesitar corrección, en algunos casos.
El astigmatismo es un tema complejo y creo que no merece la pena dar más información. Pero seguiré hablando de otras cosas: quedan algunas consideraciones más acerca de la miopía y la hipermetropía. Y queda hablar por entero de la vista cansada.Pero ya se quedan para otro artículo.